Forum Empresarial 2021

Amador Sánchez Rico, Embajador de la Unión Europea en la Argentina: «son las empresas que aportan soluciones para cambiar la economía»

El funcionario de la UE participó por primera vez en un evento de CCI France Argentine, al poco tiempo de instalarse en Buenos Aires. 

Acabo de llegar a la Argentina y espero tener otras ocasiones de participar al foro de negocios de la Cámara Franco Argentina. Voy a empezar, con algo que me parece obvio pero que no por ello se debe obviar. Este año este foro se lleva a cabo en un momento y en un contexto muy particular, en una coyuntura clave la cual plantea grandes desafíos a nivel mundial pero también en este país. Faltan días hasta las elecciones de medio término y las miradas están puestas en el posible resultado y sobre todo en el rumbo económico que va a tomar el país. En las últimas semanas, venimos todos siguiendo las discusiones en el marco del G20 y las conclusiones de los líderes que van en la dirección de las propuestas por las autoridades argentinas en lo que se refiere a lanzar el debate sobre la política de sobrecargos del FMI.

También desde el 31 de octubre, líderes y representantes de la Argentina y de los estados miembros de la UE están participando en la cumbre climática más importante del mundo, la COP 26 en Glasgow. Poner en práctica los compromisos asumidos a fin de lograr objetivos para frenar el calentamiento global va a tener consecuencias en nuestro modo de producir, en nuestro modo de organizar nuestras cadenas de suministro y en los modos de ejercer el comercio. Y a fines de este mes el comercio internacional volverá a traer los focos mediáticos con motivo de la duodécima conferencia mundial de la Organización Mundial del Comercio en Ginebra, un encuentro clave para restaurar su relevancia, su credibilidad  y equiparla para que pueda hacer frente a todos nuestros desafíos comunes.

Quisiera aprovechar para hacer unas rápidas reflexiones en cuanto a la UE y a las prioridades que tenemos, sobre todo en el ámbito del medio ambiente y de la digitalización. A finales del 2019 la UE adoptó una nueva estrategia de crecimiento para transformarse en una economía eficiente en los usos del llamado “Green Deal”. Este pacto verde es, al fin y al cabo, nuestra hoja de ruta para dotar a la UE de una economía sustentable y para transformar el reto de la recuperación económica en oportunidades.

Con esta doble transición, verde y digital tenemos la oportunidad para reconstruir mejor este famoso build back verde. El objetivo principal del pacto verde es ambicioso: la UE aspira a ser climáticamente neutra en el 2050. Para ello será necesario actuar en todos los sectores de nuestra economía, invertir en tecnologías respetuosas del medio ambiente, apoyar a la industria para que innove, desplegar sistemas de transporte público y privado más limpios, descarbonizar el sector de la energía y colaborar con socios internacionales para mejorar las reglas medioambientales y los estándares medioambientales a nivel mundial. Socios entre los que se encuentran evidentemente la Argentina.

No se trata de meros propósitos y aspiraciones. Hemos puesto en la mesa una gama de programas concretos. Por ejemplo, el paquete llamado “Apto para 55”, con su objetivo de reducir las emisiones de gas a efecto invernadero al menos de un 55 % antes del 2030; la estrategia «de la granja a la mesa» con la intención de llevar el actual sistema alimentario hacia un modelo sustentable; o la propuesta sobre el freno a la deforestación y la degradación forestal. Estos retos están estrechamente interconectados con la transformación digital, el comercio electrónico, el teletrabajo y los servicios electrónicos. Se han convertido en aspectos básicos de nuestra sociedad y muchas de estas prácticas que hemos conocido y han venido con el Covid, han llegado para quedarse.

Al fin y al cabo, son las empresas que deben adaptarse y hacer estos cambios. Son también las empresas las que pueden aportar soluciones que nos allanan el camino para lograr estos cambios y estos objetivos. La UE no lo va a lograr de manera aislada. Por eso trabajamos con nuestros socios en los foros internacionales y bilateralmente para crear un entorno político y legal propicio y para acompañar financieramente  en el caso de las pymes. También apoyamos las transiciones con varios programas de cooperación, inclusive proyectos financiados a través del Banco Europeo de Inversiones y el Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas.

Estos proyectos son oportunidades para los actores privados, para las empresas como las vuestras, con programas financiados con la UE en Argentina como el CERALC focalizado en conducta empresarial responsable y el programa sobre Economía Circular y la baja de carbono, ya ponemos en práctica esta cooperación.

He hablado de los ejes y objetivos de esta doble transición y su rol en la cooperación y en la recuperación económica. Me parece también importante destacar nuestra convicción de que la política comercial y el desarrollo de nuestras relaciones comerciales con nuestros socios, en este caso con la Argentina, son esenciales para la recuperación rápida y sostenible y esto me lleva a abordar muy brevemente la situación actual del Acuerdo UE-Mercosur.

Después de la finalización de las negociaciones, han surgido ciertas preocupaciones principalmente en materia medioambiental. Preocupaciones legítimas y preocupaciones que nuestra sociedad civil europea comparte con la mayor parte de la sociedad civil argentina. Por lo tanto, una actitud responsable de nuestros líderes políticos es de tomar en serio estas preocupaciones y de darles respuesta. Por nuestra parte estamos comprometidos para que el acuerdo UE-Mercosur funcione no solo para las economías de ambos lados sino también para los objetivos de desarrollo sustentable. Con este objetivo trabajamos para encontrar soluciones duraderas en materia de medio ambiente. Este acuerdo es mucho más que un tratado de libre comercio. Tiene una importancia geopolítica. Esperamos que, con los esfuerzos comunes basados sobre nuestros valores compartidos, podamos encontrar una solución pragmática. Tanto la UE como el Mercosur -Argentina evidentemente incluida- estarían mejor con el Acuerdo que sin él.

Para la organización de este Forum, CCI France Argentine agradece a: